QUITO, Pichincha
El pleno del Tribunal Contencioso Electoral (TCE) ratificó el jueves a Ivonne Coloma como presidenta y a Ángel Torres como vicepresidente de la institución, en medio de un período de prórroga institucional provocado por el retraso del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) en renovar a sus autoridades.
Coloma obtuvo cuatro votos a favor y uno en contra, durante la sesión realizada en Quito. El único magistrado que se opuso fue Fernando Muñoz, quien cuestionó la validez de la reelección, alegando que Coloma asumió como jueza principal recién en 2022, tras haber sido suplente, por lo que —a su juicio— no podía ser reelegida. Pese a ese argumento, la mayoría respaldó su continuidad para un nuevo período de tres años, como lo establece el Código de la Democracia.
La propuesta fue presentada por el juez Joaquín Viteri, y apoyada por los magistrados Guillermo Ortega, Ángel Torres e Ivonne Coloma. En el caso de la vicepresidencia, Torres recibió el respaldo unánime del pleno.
Prórroga institucional y retraso del CPCCS
Desde el 20 de mayo de 2025, los jueces principales y suplentes del TCE se encuentran en funciones prorrogadas, debido a que el CPCCS no ha ejecutado el concurso público de méritos y oposición para renovar al organismo. La demora ha provocado críticas de sectores políticos y sociales, dada la importancia del TCE en la resolución de litigios electorales y el control de la legalidad de los comicios.
Coloma y Torres asumieron sus cargos actuales en agosto de 2024, luego de la destitución de Fernando Muñoz como presidente. Durante este período, ambos han liderado procesos clave como la supervisión de elecciones extraordinarias, la calificación de candidaturas y la resolución de conflictos entre organizaciones políticas.
La ratificación de ambas autoridades se interpreta como un intento de mantener estabilidad institucional en momentos de incertidumbre jurídica, cuando el país se encamina a un nuevo ciclo electoral con reformas en marcha y alta polarización política. (I)