GUAYAQUIL, Guayas
La crisis en la Refinería de Esmeraldas mantiene paralizados 49 frentes de trabajo y ha dejado a 104 calles de Guayaquil sin atención, afectando a más de 310.000 personas, aseguró el alcalde de Guayaquil, Aquiles Alvarez.
En su enlace radial del 13 de agosto, Alvarez intentó justificar la falta de obras atribuyendo la situación a una “producción de asfalto a cuentagotas” y defendiendo la importación del insumo AC20, al que calificó como “mucho mejor que el ecuatoriano” y tachó al producto nacional de “recontra paupérrimo”.
Y el Servicio Nacional de Contratación Pública (Sercop) le cerró la puerta. El Telégrafo difundió declaraciones del director encargado del SERCOP, José Julio Neira, en la que responde a lo dicho por el alcalde porteño.
“No, alcalde procesado. Lo que estamos haciendo es que no tengas un negociado con Bustos. Petroecuador nos confirmó que hay producción de este material desde el 4 de agosto. Así que mejor lo invitamos a contribuir al consumo local y producción nacional”, refiere el documento.
La declaración de Neira golpea directamente el argumento municipal y pone sobre la mesa una acusación grave en la que se sostiene que “el intento de importar asfalto podría esconder intereses económicos particulares”.
Neira recordó que la producción nacional ya estaba en marcha cuando el Municipio solicitó la compra internacional, por lo que el trámite no tenía sustento. (I)
