
GUAYAQUIL, Guayas
Desde la pandemia, la modalidad virtual se ha consolidado como un método habitual de trabajo y enseñanza, permitiendo a los estudiantes gestionar su aprendizaje desde cualquier dispositivo tecnológico.
Si bien la educación busca el desarrollo intelectual, muchas madres consideran que sus hijos aprenden primero a escribir en computadoras o celulares antes que en papel, lo que, aseguran, provoca la pérdida de la esencia de la escritura manual. Como consecuencia, algunos adolescentes llegan al colegio con caligrafía deficiente, lo que ha generado críticas sobre si la educación virtual mantiene un nivel adecuado de enseñanza.
Actualmente, la práctica de la escritura a mano es cada vez menor, y muchos consideran que se está perdiendo este arte. Surge entonces la pregunta: ¿el Ministerio de Educación tiene algún plan o estrategia para fomentar la caligrafía entre los estudiantes, o queda en manos de los padres reforzar esta habilidad mediante ejercicios y planas?
Aunque el uso de la tecnología en las aulas puede limitar el desarrollo de la escritura manual y de la capacidad crítica de los estudiantes, la enseñanza de esta habilidad sigue siendo esencial. La escritura a mano sigue siendo necesaria en procesos administrativos, trámites y documentos que requieren llenar formularios en papel y pluma, por lo que aprenderla no pierde su relevancia. (I)
