
GUAYAQUIL, Guayas
El presidente de Barcelona SC, Antonio Álvarez, advirtió que un jugador del primer plantel recibió amenazas de muerte, revelación que incluyó en un duro comunicado público difundido el 17 de diciembre de 2025, en medio del conflicto por cuatro meses de sueldos impagos que llevó a los futbolistas a anunciar la paralización de entrenamientos.
Álvarez reaccionó al pronunciamiento del plantel con un mensaje en el que cuestionó el comportamiento profesional de varios jugadores y responsabilizó a esas conductas por el fracaso deportivo de la temporada. En su texto, afirmó que algunos futbolistas frecuentan fiestas, incumplen rutinas y llegan a entrenar en malas condiciones, pese a contar —según dijo— con viajes chárter, hoteles cinco estrellas y servicios de primer nivel.
El directivo aseguró que el club estuvo al día en pagos durante partidos clave y recordó derrotas en Copa Libertadores, la eliminación ante Cuenca Juniors en Copa Ecuador y caídas en el torneo local. Además, anunció que al menos 10 jugadores no seguirán en el proyecto 2026.
La revelación más sensible del comunicado se centró en la seguridad del plantel. Álvarez sostuvo que financió seguridad privada para un futbolista amenazado de muerte, aunque no reveló su identidad. Más tarde, una fuente del club confirmó que no se trataba de Mario Pineida, fallecido horas después en un ataque armado en Guayaquil, sino de Dixon Arroyo, quien recibe resguardo desde enero de 2025 tras su llegada procedente del Inter Miami.
Hasta el cierre de esta nota, Barcelona SC no emitió un informe institucional con detalles sobre protocolos de seguridad ni sobre coordinación con autoridades, mientras la crisis económica y deportiva sigue abierta en el club. (D)
