LATACUNGA, Cotopaxi
Una nueva pieza se integra al caso Metástasis: la versión de Marcelo Nicolás L., amigo cercano del narco Leandro Norero (+). El sujeto comentó detalles inéditos sobre la relación entre el líder criminal y otros exfuncionarios penitenciarios.
Marcelo, quien ya cumplió su pena por delitos de tráfico de armas y drogas, relató el pasado sábado 16 de marzo del 2024 ante la Fiscalía varios datos sobre cómo fue la estancia de Norero en el Centro de Privación de la Libertad de Cotopaxi en Latacunga.
El testigo admiraba y consideraba al narco como su padre e incluso fue la persona que reconoció el cadáver del capo, aquel tres de octubre del 2022, fecha del asesinato.
Durante el primer mes de encarcelamiento en Cotopaxi, Norero habría tenido varias visitas de diferentes personas que le dieron regalos y le pidieron dinero para proveer comodidades, según narró Marcelo.
Los implicados serían los directores del centro de rehabilitación de esa época, así como guías penitenciarios.
“Empezaron a ir los guías a pedirle plata, a pedirle favores y él también les pedía que le ingresen cosas. Más que todo el agente Mendoza y el agente Moya eran los que ingresaban las balas y las armas de fuego. Personalmente, yo vi una Baby Glock y una Glock modelo 17, como las que utilizan los policías, que era la que teníamos escondida en la celda número 9 que había sido la celda del vicepresidente Glas, porque esa celda tenía un vacío en la división de metales del baño, por ahí se metía la pistola”, dijo el testigo, según la versión a la que tuvo acceso la cadena Ecuavisa.
Entrega de 200 mil dólares
El sujeto también comentó sobre la presunta entrega de 200 mil dólares por parte de Norero al general Pablo R., entonces director del SNAI. La solicitud habría llegado a través de Claudia Garzón, la excomisionada colombiana.
“Claudia le dijo a Leandro que lo que necesitaba Pablito, porque así se refería a él, eran unos 200 mil dólares como un donativo para el SNAI, pero que se lo entregue en efectivo a él y Leandro le dijo que no había ningún problema, que hable con alias Estimado, que él iba a entregarle la plata en Guayaquil. Me encargó a mí que converse con el Estimado hasta que esté entregada la plata”.
Posteriormente, el entonces director del SNAI y ahora procesado por el Caso Metástasis habría arribado a la cárcel para agradecer el gesto del narco.
“Me dijo que muchas gracias por el dinero y que por favor les llamara, de una manera muy discreta, a Leandro y a Israel (hermano de Norero). Acto seguido yo fui a la celda número 3 y les dije que ya estaba todo hablado, que salgan nomás a hablar, que todo estaba en orden. Ellos salieron a hablar y se pusieron en una esquina al fondo, a donde no enfocaba la cámara, aunque igual se puede ver la salida de ellos y la llegada al lugar”, aseguró Marcelo, según reporta Ecuavisa. (I)