CUENCA, Azuay
La Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) realizó un operativo en Cuenca y Otavalo el pasado 25 de enero de 2025, logrando la incautación de más de 2.000 productos cosméticos falsificados. Los operativos se llevaron a cabo luego de una denuncia presentada por un representante oficial de una marca extranjera que había sido falsificada.
Incautación de productos falsificados en dos ciudades
En total, se decomisaron 2.087 unidades de cosméticos que no cumplían con los estándares de seguridad y salud establecidos por las autoridades. Estos productos, que estaban en circulación en establecimientos de Cuenca y Otavalo, representaban un riesgo para la salud de quienes los utilizaban, especialmente porque no contaban con controles sanitarios adecuados.
El operativo de Arcsa, que incluyó inspecciones detalladas en varios locales comerciales, resultó en la clausura de dos negocios, los cuales estaban comercializando estos cosméticos irregulares sin las debidas autorizaciones. Las autoridades señalaron que los productos falsificados eran distribuidos bajo el nombre de una marca internacional reconocida, pero sin el respaldo de su fabricante.
Acciones contra el riesgo para la salud pública
El director de Arcsa, quien estuvo presente durante la intervención, enfatizó la gravedad de la situación, destacando que el uso de cosméticos no verificados puede causar efectos adversos en la piel y la salud general de los consumidores, ya que muchos de estos productos contienen ingredientes no regulados o peligrosos.
La incautación forma parte de un esfuerzo continuo de Arcsa para proteger la salud pública y garantizar que solo productos aprobados y verificados lleguen al mercado ecuatoriano. En este sentido, las autoridades reiteraron su llamado a los consumidores para que comprueben que los productos que adquieren provienen de fuentes legítimas.
Con este decomiso, surge la interrogante sobre la magnitud de la venta de cosméticos falsificados en todo el país y si existen más establecimientos comercializando estos productos en otras regiones. La lucha contra el contrabando y la falsificación sigue siendo un desafío constante para las autoridades sanitarias. (I)