QUITO,Pichincha
Ante la crisis fiscal (alto déficit y millonaria cuenta de atrasos), la Asamblea rechazó la subida del IVA el pasado 6 de febrero de 2024 pero aprobó tres impuestos que no estaban en el proyecto de ley original enviado por el presidente Daniel Noboa: impuesto temporal sobre las utilidades de bancos y cooperativas; impuesto temporal sobre las utilidades de empresas y la subida del Impuesto a la Salida de Divisas (ISD) del 3,5% al 5%.
Ese mismo 6 de febrero, Noboa emitió un veto parcial a la Ley Orgánica para Enfrentar el Conflicto Armado Interno, la crisis social económica para insistir en la subida del IVA. pero con el añadido de que se abre la puerta a que a discreción del ejecutivo, con el aval del ministerio de Economía, el IVA puede moverse entre el 13% y 15% solo con un decreto ejecutivo.
Este 9 de febrero de 2024, durante un pleno virtual, la asambleísta oficialista Valentina Centeno mocionó que se ratifique el texto original aprobado por la Asamblea durante el pasado 6 de febrero.
Esto quería decir ratificarse en el rechazo a la subida del IVA y confirmar los tres impuestos (dos temporales sobre las utilidades y la subida del ISD). Con el voto favorable de 78 asambleístas no se aprobó esa moción, debido a que se necesitaban al menos 92 votos.
A continuación, se mocionó el allanamiento al veto parcial del presidente Noboa. Con el voto favorable de 44 asambleístas y el voto en contra de 82 legisladores, tampoco pasó la moción. Se necesitaban al menos 70 votos a favor para el allanamiento.
Así, el veto parcial (con el aumento del IVA) pasa a estar aprobado de manera tácita y el presidente Noboa puede publicarlo para que entre en vigencia.
Es decir, en concreto, la subida del IVA se concreta, junto con todo lo aprobado por la Asamblea durante el 6 de febrero. Noboa podrá recuadrar alrededor de un poco más de $1.400 millones este año en el caso de que se suba inmediatamente el IVA al 15%: alrededor de $1.000 millones por el IVA y $424 millones por impuestos temporales y subida del ISD.
Esto representa alrededor del 28% del déficit fiscal estructural del Ecuador, el cual está en alrededor de $5.000 millones al año. O, para decirlo de otra manera, de manera sistemática a la caja fiscal le falta $5.000 millones en ingresos para cubrir todos los gastos en el sector público.
Pero, en 2024 también se sumarán ingresos extraordinarios de las dos primeras leyes económicas urgentes de Noboa. Esto incluye alrededor de $800 millones de la remisión tributaria, $900 millones de autorretenciones de grandes contribuyentes y $100 millones de otras fuentes.
Así, para este año se tendrán extras $3.200 millones, los cuales cubren el 64% del déficit estructural. Eso se irá reduciendo en los años posteriores hasta $680 millones de manera permanente, debido a un IVA en 13% y un ISD al 5%.
Por eso, se necesitarán medidas urgentes por el lado del gasto como la focalización de los subsidios a los combustibles y el recorte y optimización del tamaño del Estado.
Sin embargo, hay que recordar que se deja abierta la puerta para que el presidente modifique el IVA entre el 13% al 15% a discreción.
El ex director del Servicio de Rentas Internas (SRI), Francisco Briones, se preguntó sí la economía ecuatoriana tiene la capacidad de resistir y pagar todo esto.
Se ha hablado mucho sobre un impacto fuerte en la inflación con la subida del IVA. Sin embargo, si se analiza lo que pasó cuando el expresidente Rafael Correa subió ese impuesto entre junio de 2016 y junio 2017, se puede visualiza que no se produjo una explosión inflacionaria.
Así, es cierto que, en un primer momento la inflación general pasó de 0,92% en mayo de 2016 a 1,29% en junio de 2016. Es decir, se produjo un ajuste inicial al alza.
Pero, a partir de ahí, la inflación sucesivamente se redujo mes a mes hasta que en junio de 2017 cerró en 0,32% anual.
En el caso de la inflación de los alimentos, entre junio y noviembre de 2016 se produjo una tendencia marcada a la baja. Comenzó en 1,87% y llegó hasta -0,48%.
Sin embargo, a partir de diciembre de 2016 y hasta junio de 2017, en medio de las elecciones presidenciales y el aumento del gasto público desde el Gobierno para apuntalar la candidatura oficial (Lenin Moreno), la inflación de los alimentos tomó una tendencia al alza hasta cerrar en el 2,74%.
Andrés Moreno, economista, puntualizó que, en este caso, el elemento inflacionario fue producido por el Gobierno y el gasto público más que por la subida del IVA.
Como punto de partida, las proyecciones de inflación en Ecuador para 2024 son de alrededor del 2%.
El ministro de Economía, Juan Carlos Vega Malo, ha defendido que una posible subida del IVA del 12% al 15% afectará menos a los sectores más pobres y medios porque la mayoría de los productos básicos (no procesados), transporte público, servicios básicos, entre otros, están exentos de pagar ese impuesto.
Según un estudio de la Escuela Superior Politécnica del Litoral, elaborado por Jandry Moreta y el economista Manuel González, por cada punto porcentual de aumento en el IVA, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) se incrementa 0,029% y el Índice de Precios al Productor se incrementa un 0,091%.
Así, si el IVA sube al 15%, la inflación proyectada del 2% podría escalar a alrededor de 2,1%.
La mayor afectación está en los segmentos de clase media alta y alta, que son los que consumen más servicios como restaurantes y compran más bienes de alto costo.
Actualmente, más del 52% de la economía nacional es informal, por lo que no paga impuestos como el IVA.