QUITO, Pichincha
El pleno de la Asamblea Nacional ratificó ayer miércoles, el archivo de un proyecto de ley que causó controversia en plena campaña electoral al proponer sanciones a las iglesias que emitiesen manifestaciones de carácter político o promoviesen conductas contrarias a los derechos humanos o libertades fundamentales durante sus actividades religiosas, lo que podía ser castigado incluso con su disolución.
Con 97 votos a favor y 4 abstenciones, el Legislativo confirmó el archivo definitivo de esta iniciativa legislativa denominada Ley Orgánica de Libertad e Igualdad Religiosa, presentada por la asambleísta correísta Esther Cuesta.
El texto establecía también que las iglesias fuesen objeto de auditoría por parte de la Contraloría General del Estado (Tribunal de Cuentas) al uso de los fondos públicos entregados a estas organizaciones religiosas.
Criticas
La iniciativa legislativa fue duramente criticada en la Asamblea Nacional por la oficialista Acción Democrática Nacional (ADN), el partido del presidente Daniel Noboa, que en los comicios presidenciales fue reelegido para el periodo 2025-2029.
La Conferencia Episcopal también celebró en un comunicado que el correísmo diese marcha atrás con este proyecto de ley, al que el episcopado ecuatoriano calificó de “malintencionado, deficiente, sectario, peligroso e inconstitucional”.
El debate
Durante el debate para su archivo definitivo, el asambleísta Adrián Castro, de ADN, indicó que “no se requiere legislación secundaria para la libertad religiosa”.
“Este proyecto normativo representaba un aumento de gasto público, privilegios tributarios, e interfiere con los dogmas de fe católica”, sostuvo Castro.
Y agregó que es inconstitucional, toda vez que buscaba crear un Consejo Consultivo y que “la fe y la religión no pueden estar supeditadas a ningún precepto político”.
Por su parte, el asambleísta Carlos Rodríguez indicó que la religión debe ser con libertad y cada ecuatoriano debe profesar sus creencias sin delimitaciones. (I)