QUITO, Pichincha
El Comité Nacional para el Estudio Regional del Fenómeno de El Niño (Erfen) se pronunció el pasado 22 de enero de 2025 sobre la influencia de La Niña en las lluvias de Ecuador, basándose en la declaratoria de “Condiciones La Niña” emitida por la NOAA el 9 de enero.
Según el análisis realizado el 21 de enero, las lluvias en enero han sido frecuentes en el litoral y el austro del país, con precipitaciones dentro de lo normal en el sur de la Sierra. Estas condiciones han estado influenciadas por sistemas atmosféricos como la Vaguada Cercana al Ecuador, la Alta de Bolivia y ondas tropicales.
El Comité señaló que La Niña, en su versión Modoki, genera anomalías frías en el Pacífico Central y prevé mantener su influencia hasta marzo. Este fenómeno podría acarrear lluvias dispersas en el litoral, con mayor intensidad en Manabí, Esmeraldas y Guayas, mientras que en la región amazónica y la Sierra se espera un incremento de precipitaciones en áreas específicas.
El oceanógrafo Franklin Ormaza subrayó que, aunque La Niña genera deficiencia de lluvias en la costa, también trae beneficios como mayores precipitaciones en la Amazonía y los Andes, útiles para la agricultura y las hidroeléctricas. Asimismo, el sector pesquero podría aprovechar las aguas ricas en nutrientes que aporta el fenómeno.
¿Está Ecuador preparado para gestionar los efectos mixtos de La Niña en sus diversas regiones? (I)