QUITO, Pichincha
Ecuador sacará a concurso internacional la construcción de una carretera de 80 kilómetros a un costo de más de 140 millones de dólares en la Amazonía, para sortear la erosión regresiva que amenazan la industria e infraestructura petroleras.
Así lo anunció este jueves el ministro de Transporte y Obras Públicas, Marcelo Cabrera, en la Asamblea Nacional, en una sesión que analizó ese fenómeno geológico, cuyos efectos se manifiestan de forma palpable desde 2020 en el río Coca y afluentes.
La erosión ha provocado deslizamientos y daños a oleoductos, así como reducción y desaparición de cascadas y cauces, y desprendimientos en los márgenes de vías fluviales de la zona.
Cabrera anunció en su comparecencia que en los próximos días se convocará un proceso de licitación internacional para la construcción de la alternativa vial definitiva, proyecto que está previsto se ejecute en un plazo de dos años.
El objetivo, según detalló, es circunvalar la zona de la erosión y constará de 45 kilómetros de trazado que serán totalmente nuevos.
El financiamiento para la obra pública se buscará con el Banco Interamericano de Desarrollo, la Cooperación Andina de Fomento y el Banco Mundial, avanzó el responsable.
Por su parte, el ministro de Energía y Recursos Naturales No Renovables, Juan Carlos Bermeo, informó que la erosión está detenida desde hace 192 días por una roca de gran tamaño situada a una distancia de 7,9 kilómetros de la central hidroeléctrica de Coca-Codo Sinclair, en la región amazónica.
El pasado 8 de diciembre, tres oleoductos resultaron afectados y paralizaron el bombeo de crudo en la zona debido al fenómeno erosivo en la cuenca del Coca. Previamente, en 2020, otro deslizamiento a la altura de la desaparecida cascada San Rafael en la misma región, provocó un vertido de crudo que afectó a 27.000 personas. (I)
