QUITO, Pichincha
Operativos realizados en Quito en el último año y medio dejaron una tonelada de cigarrillos de contrabando retenidos. Los productos fueron hallados en distintos puntos de la capital con la colaboración del Cuerpo de Agentes Metropolitanos y la Policía Nacional.
La Agencia Metropolitana de Control (AMC) entregó la mercadería de contrabando a personal de la Empresa Pública Metropolitana de Gestión Integral de Residuos Sólidos (Emgirs) para la destrucción.
Según declaraciones de la supervisora municipal, Lira Villalva, de los 80 bultos de cigarrillos de contrabando que representan estas retenciones, 60 han sido retirados en la actual administración municipal.
Productos retenidos
La normativa municipal establece que los productos retenidos durante operativos de control, que consisten un riesgo para la salud pública, deben ser destruidos o desechados por la autoridad competente. A su vez, la venta ilegal en espacios públicos contribuye al aumento de actividades delictivas y genera desorden.
La Emgirs, como parte de este proceso, trasladará los paquetes de cigarrillos al espacio designado en el relleno sanitario de Quito, en el sector del Inga Bajo, cubriéndolos con una capa de tierra y residuos antes de su compactación. El objetivo es que sea un procedimiento garantiza una gestión ambientalmente responsable.
De acuerdo con datos del Municipio de Quito, anteriormente, los cigarrillos de contrabando se incineraban a cielo abierto, sin controles. Actualmente, Emgirs ha preparado una celda especial de confinamiento, donde se procederá con la destrucción mecánica del producto.
Luego, se cubrirá con una capa final de tierra y una geomembrana de dos milímetros que permitirá mantenerlo aislado, evitando así la contaminación ambiental. Esto según versiones de Santiago Andrade, gerente general de la entidad. (I)