QUITO, Pichincha
Ecuador y Italia reforzaron el 26 de noviembre su cooperación en seguridad durante una reunión en el Palacio de Carondelet entre el presidente Daniel Noboa, la canciller Gabriela Sommerfeld y el procurador nacional Antimafia y Antiterrorismo de Italia, Giovanni Melillo. El encuentro apuntaló una estrategia conjunta para enfrentar el crimen organizado transnacional y el terrorismo, con apoyo directo de la Unión Europea.
Las autoridades revisaron los avances del programa italo–ecuatoriano de apoyo al sistema de seguridad y justicia, que incluye asistencia técnica para fortalecer la inteligencia criminal, la investigación de lavado de activos, la protección de testigos y las capacidades policiales especializadas. Sommerfeld destacó que Italia se convirtió en un aliado estratégico para Ecuador por su experiencia en el combate a estructuras mafiosas de alto impacto.
La reunión dio continuidad a la agenda abierta en julio de 2025, cuando Noboa y Melillo se encontraron en Roma para impulsar un plan de formación conjunta para fiscales y policías. Ese programa busca modernizar los modelos de protección de testigos, actualizar la normativa frente a nuevas dinámicas delictivas y mejorar la investigación de organizaciones vinculadas al narcoterrorismo.
La presencia de Melillo —una figura clave en la lucha contra la Camorra y referente internacional en persecución penal contra mafias— fue interpretada como un respaldo directo a la estrategia de seguridad ecuatoriana. Su visita ocurre en un contexto en el que el Gobierno mantiene un conflicto armado interno declarado contra los Grupos Delincuenciales Organizados.
Ecuador y la Unión Europea
El encuentro también se enmarca en el reciente acuerdo de intercambio de datos entre Ecuador y la Unión Europea, suscrito en septiembre de 2025, que permite compartir información estratégica con Europol para combatir redes delictivas transnacionales. Ese esquema de cooperación ya contribuyó a la incautación de 80 toneladas de droga y a la detención de 36 personas en marzo del mismo año, según reportes internacionales.
El Ejecutivo remarcó que esta alianza con Italia y la UE se integra a su estrategia de seguridad, que exige coordinación global, tecnología avanzada y capacitación continua para rastrear rutas ilícitas, desarticular estructuras financieras criminales y mejorar la respuesta institucional frente a amenazas que trascienden fronteras. (D)
