QUITO, Pichincha
Han transcurrido casi cinco años desde que el icónico tren ecuatoriano cesó sus operaciones, luego de que en mayo de 2020 el expresidente Lenín Moreno ordenara la liquidación de Ferrocarriles del Ecuador. A pesar de que el proceso de liquidación de la empresa aún no concluye, en 2025 dos tramos ferroviarios volverán a estar operativos.
Se trata de los tramos Alausí – Sibambe, conocido como «Nariz del Diablo», con 12 kilómetros en Chimborazo, y el tramo Ibarra – Andrade Marín, denominado «Tren a la Fábrica», con 13 kilómetros en Imbabura. Ambos han sido reactivados mediante convenios con los municipios de Alausí, Ibarra y Antonio Ante, permitiendo que los gobiernos locales asuman la operación, mientras que el Ministerio de Transporte ha realizado inversiones clave.
El ministro de Transporte y Obras Públicas, Roberto Luque, detalló que, en el caso de la «Nariz del Diablo», el Ministerio transfirió USD 700.000 al Municipio de Alausí para mantenimiento y obras pendientes. Además, indicó que la reactivación del sistema ferroviario nacional es parte de un plan a mediano y largo plazo, impulsado a través de una Alianza Público-Privada.
Grave deterioro y robos afectan la red ferroviaria
El sistema ferroviario ecuatoriano cuenta con 965,6 kilómetros de vías, por lo que los tramos rehabilitados representan apenas el 2,5% del total. Según un informe del Ministerio de Transporte de 2022, varios tramos han sufrido deterioro severo y robos de infraestructura. El exministro de Transporte, César Rohon, reveló que el tramo Bucay-Durán, en Guayas, fue uno de los más afectados, con el robo de rieles.
En total, se han registrado 267 denuncias por robo de infraestructura ferroviaria. El informe señala que 387,28 kilómetros no están operativos debido a derrumbes, socavamiento de plataformas, vegetación excesiva y pérdida de elementos esenciales de la vía férrea.
Iniciativas previas y nuevos intentos de reactivación
La reactivación de la «Nariz del Diablo» comenzó durante el gobierno de Guillermo Lasso. El 29 de septiembre de 2023, Lasso y Rohon participaron en un evento de reapertura, aunque en ese momento la operación no se volvió comercial debido a la falta de un plan de negocios y trámites administrativos pendientes.
El gobierno del presidente Daniel Noboa busca ahora establecer una Alianza Público-Privada para potenciar el proyecto y atraer mayor afluencia turística. Luque confirmó que ya hay empresas internacionales interesadas en operar el tren turísticamente y que el Ministerio ha realizado estudios con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para estructurar financieramente la rehabilitación del sistema.
En 2022, el gobierno de Lasso ya había anunciado un proceso similar, donde ocho empresas manifestaron interés en invertir más de USD 2.500 millones en la rehabilitación del tren. Sin embargo, el proceso no prosperó debido a demoras en su estructuración. En 2023, Lasso intentó nuevamente impulsar el proyecto, pero la declaración de «muerte cruzada» en mayo interrumpió su gestión.
El gobierno de Noboa espera concretar los convenios definitivos en abril de 2025 y realizar pruebas en un plazo de 30 días para iniciar la operación comercial de los tramos rehabilitados. (I)