OTAVALO, Imbabura
Ante la crisis energética que enfrenta Ecuador debido al estiaje, dos empresas textiles de Otavalo, Imbabura, han logrado reducir costos operativos y minimizar su impacto ambiental gracias a la instalación de plantas fotovoltaicas.
Se trata de Empresas Pinto, dedicada a la confección de prendas de vestir, e Indutexma, especializada en la producción de telas. Ambas compañías identificaron el alto índice de radiación solar en la región como una oportunidad para adoptar un modelo energético más sostenible.
Autogeneración de energía y reducción de huella de carbono
Empresas Pinto instaló 558 paneles solares de fabricación china en el techo de su planta, lo que le permite cubrir el 50% de su consumo mensual de electricidad. Desde 2021, opera con un medidor bidireccional conectado a Emelnorte, lo que facilita el autoconsumo de 300 kWh mensuales.
Indutexma, con una demanda energética superior (dos megavatios), adquirió 1 440 paneles solares que generan 750 kWh, cubriendo el 35% de sus necesidades. Gracias a esta inversión, ha logrado disminuir su factura eléctrica en un 35% y evitar la emisión de 223 toneladas de CO₂ al año.
Crisis energética y medidas de contingencia
Las interrupciones eléctricas de hasta 14 horas diarias han puesto a prueba la capacidad operativa de estas industrias. No obstante, ambas compañías han garantizado la continuidad de sus operaciones gracias a sus sistemas fotovoltaicos y generadores de respaldo.
Pinto produce 18 toneladas de tela al mes para la confección de 80 000 prendas. Para enfrentar los apagones, opera con tres generadores de 288, 150 y 120 kVA, alimentados con diésel.
Por su parte, Indutexma fabrica 180 toneladas de tela mensuales, de las cuales el 10% se exporta a Colombia. Inicialmente contaba con un solo generador de 450 kW, pero en abril de 2024 adquirió dos más, de 388 kW y 350 kW, lo que le ha permitido mantener una producción estable, aunque no a plena capacidad.
Futuro energético y expansión de proyectos
Indutexma proyecta expandir su capacidad fotovoltaica para cubrir el 50% de su consumo eléctrico durante 2025, con la instalación de nuevos paneles en un predio cercano a su planta. Pinto, en cambio, apunta a alcanzar la autosuficiencia energética total el próximo año.
En Imbabura, el Gobierno ha aprobado licencias ambientales para la construcción de proyectos fotovoltaicos con una capacidad total de 399,85 megavatios (MW). Entre ellos destacan Imbabura Solar (120 MW), Ambi Solar (60 MW) y dos plantas en Urcuquí (120 MW en conjunto).
Innovación ambiental y reducción del impacto industrial
Ambas empresas han implementado iniciativas para disminuir el consumo de agua y reducir la contaminación, sustituyendo búnker y diésel por gas licuado de petróleo (GLP). Además, trabajan en la recuperación y tratamiento de aguas residuales.
Indutexma desarrolla un proyecto con una firma italiana para la tintura de telas con productos naturales, utilizando extractos de eucalipto, nueces, col morada, achiote, cebolla, cúrcuma y chilca. Este proceso, en fase experimental, busca industrializarse en 2025, contribuyendo a una producción más ecológica.
Adicionalmente, estas empresas han incursionado en la emisión de bonos de carbono, certificaciones de algodón orgánico y tecnologías de estampación menos contaminantes. ¿Podría esta apuesta por energías limpias servir de modelo para otras industrias ecuatorianas? (I)
