QUITO, Pichincha
El Frente Unitario de los Trabajadores (FUT) rechazó el pasado 19 de diciembre de 2024, el incremento de solo USD 10 en el salario básico unificado para 2025, calificándolo de «pírrico» e insuficiente. Este ajuste se determinó tras un desacuerdo entre empleadores y trabajadores, quienes no lograron llegar a un consenso.
El FUT había propuesto un aumento superior, solicitando un ajuste de más de USD 100. José Villavicencio, presidente del FUT, destacó que el incremento resultaba en solo 33 centavos diarios, lo que, en términos prácticos, se traduce en apenas cuatro centavos por hora laboral. Esta situación fue calificada como «insólita», especialmente considerando las diferencias con la propuesta empresarial.
En respuesta a este aumento, el FUT convocó una gran convención nacional para el 11 de enero de 2025, que se llevará a cabo en Quito. Allí, las organizaciones sindicales planean definir acciones jurídicas y medidas de hecho para rechazar el aumento, que consideran una violación de los derechos laborales.
Además, Marcela Arellano, delegada del FUT ante el Consejo Nacional de Trabajo y Salarios, acusó al gobierno de Daniel Noboa y a los empleadores de haber alcanzado un acuerdo a espaldas de los trabajadores, lo que agranda la brecha entre el salario y la canasta básicos familiar.
El FUT subraya que el gobierno de Noboa no ha cumplido con la promesa de incrementar el salario a USD 500, como se había propuesto en la administración anterior. Frente a esta situación, ¿Realmente el gobierno y los empresarios están comprometidos con mejorar las condiciones laborales del país? (I)