GUAYAQUIL, Guayas
A los transportistas poco les importó las advertencias de la Agencia de Tránsito Municipal (ATM) de sancionarlos penal y administrativamente si paralizaban el transporte. Y hoy Guayaquil amaneció sin unidades del transporte urbano.
Los puntos neurálgicos fueron en la Terminal Terrestre, la entrada de la 8 y otros puntos de Guayaquil.
Hasta poco antes de las 06:00 los buses urbanos llegaron hasta la Terminal Terrestre, pero luego ya dejaron de circular, ante la desesperación y reclamos de los pasajeros que esperaban poder trasladarse hasta sus sitios de trabajo y estudio.
Doce de las 38 cooperativas de transporte urbano, paralizaron sus actividades.
Ayer domingo, el Municipio de Guayaquil se anticipó ante una posible paralización del transporte y publicó, pasadas las 20:00 un comunicado en el que anunciaba medidas y recordó que ha mantenido mesas de trabajo con los transportistas.
“El Sistema Metrovía incrementará el número de unidades en las rutas troncalizadas y alimentadoras, para responder al aumento de la demanda”, informó la Agencia de Tránsito y Movilidad de Guayaquil (ATM).
El impasse entre el Municipio de Guayaquil y los transportistas se relaciona con la fijación de la tarifa de transporte urbano y la Caja Común, un punto de quiebre entre los dirigentes de la FETUG y el alcalde Aquiles Alvarez.ç
Hace tres semanas los agremiados a la FETUG, dirigidos por Cristian Sarmiento, se apostaron en los bajos del Municipio porteño y le exigían al alcalde Alvarez que resuelva sus peticiones porque “estaban cansados de tanto hablar sin soluciones”.
