CUENCA, Azuay
El servicio de hemodinamia del Hospital Vicente Corral Moscoso, en Cuenca, cumplió su primer año de funcionamiento tras su reapertura, beneficiando a 220 pacientes con enfermedades cardiovasculares. La atención inmediata y especializada ha permitido tratar con éxito casos de infarto agudo de miocardio y aplicar procedimientos avanzados de cardiología intervencionista.
“Durante este tiempo realizamos no solo angioplastias coronarias, sino también técnicas de vanguardia como denervaciones renales y litotricia coronaria”, señaló Rodrigo Mendoza, cardiólogo-hemodinamista del hospital.
La hemodinamia permite diagnosticar y tratar patologías del sistema cardiovascular introduciendo catéteres en arterias y venas para evaluar el flujo sanguíneo, medir presiones y observar las estructuras del corazón. Estas intervenciones han evitado derivaciones a otros centros, lo que representa un ahorro de aproximadamente USD 1 millón para el sistema de salud pública.
Una de las pacientes beneficiadas, Melissa Maza, recibió una denervación renal. “Antes dependía de varias pastillas para controlar mi presión arterial. Después de la operación, la presión ha mejorado y he reducido la medicación”, relató.
El servicio de intervencionismo cardiovascular funciona en un espacio remodelado, equipado con tecnología de última generación como un nuevo Arco en C de alta gama, que ofrece imágenes más precisas para detectar anomalías cardíacas con mayor claridad.
El área se mantiene operativa 24/7, con un equipo multidisciplinario altamente capacitado para responder a emergencias cardiovasculares en cualquier momento. Con esta infraestructura y atención especializada, Cuenca consolida un avance clave en la atención pública de cardiología a nivel nacional. (I)