Por José Chica Pincay, MSc
El actual Código de la Democracia en Ecuador necesita una reforma que permita reducir las desigualdades en el financiamiento electoral y fortalecer la participación ciudadana.
Es fundamental asegurar que las elecciones representen los intereses de la sociedad en su conjunto, no solo los de quienes cuentan con mayores recursos económicos.
Para ello, se proponen medidas que buscan un sistema más equitativo y transparente, donde el dinero no condicione el resultado electoral, sino la voluntad popular.
Entre las principales propuestas está la incorporación de fondos públicos que complementen pequeñas donaciones ciudadanas. Este mecanismo incentivaría a los ciudadanos de bajos recursos a participar, ya que sus aportaciones tendrían un mayor impacto en las campañas.
Al multiplicar el valor de estas donaciones, se reduciría la dependencia de grandes donantes, equilibrando el poder económico y dando más protagonismo a la ciudadanía.
Asimismo, se sugiere otorgar subsidios públicos a los candidatos que cumplan ciertos requisitos, a cambio de renunciar a fondos privados. Esta medida permitiría a los aspirantes enfocarse en propuestas para la población, sin compromisos con grandes donantes o empresas, lo que reforzaría el vínculo directo con los votantes y la legitimidad del proceso democrático.
Un punto esencial es establecer límites estrictos a las contribuciones de donantes individuales y corporativos, para evitar que un grupo reducido influya desproporcionadamente en las elecciones.
Además, la publicación obligatoria de todas las donaciones garantizaría mayor transparencia sobre el origen de los fondos.
La creación de una autoridad electoral autónoma es clave para supervisar el cumplimiento de estas normativas, con capacidad de realizar auditorías y monitorear las finanzas de las campañas en tiempo real. Esta entidad debe ser imparcial, tener independencia política y estar dotada de recursos para ejercer una fiscalización eficiente.
En resumen, para garantizar el cumplimiento de las reglas, se deben imponer sanciones proporcionales a las infracciones, que incluyan desde multas hasta la inhabilitación para competir en futuros comicios.
La reforma del Código de la Democracia es vital para asegurar elecciones justas, transparentes y verdaderamente representativas de la ciudadanía en Ecuador. (O)