QUITO, Pichincha
Las diferencias en la Asamblea Nacional se mantienen. La muestra es que solo 67 de 135 legisladores se conectaron a la sesión virtual 759 del Pleno de la Asamblea Nacional, que fue convocada a las 22:00 de ayer sábado. La Ley Tributaria estaba en el fondo del debate.
Se trataba de la continuación de la sesión 759, suspendida el pasado 24 de febrero cuando se produjeron gritos y apagones.
El único punto pendiente del orden del día se refería al debate sobre un proyecto de resolución para disponer, de forma inmediata, que se reanuden las sesiones del Pleno, que están suspendidas.
El objetivo de fondo es evitar que el Consejo de Administración Legislativa (CAL) archive el proyecto derogatorio a la Ley Tributaria, que fue aprobada por un decreto del Ejecutivo.
Minutos después de las 22:00, Llori dispuso que se constate el quórum reglamentario para reinstalar la sesión.
Según el artículo 7 de la Ley Orgánica de la Función Legislativa, “para la instalación y funcionamiento del Pleno se requerirá la presencia de la mayoría absoluta de las y los miembros de la Asamblea Nacional”.
La presidenta de la Asamblea Nacional, Guadalupe Llori Abarca necesitaba contar con 70 legisladores para sesionar. Sin embargo, casi una hora después solo 67 asambleístas se encontraban registrados de forma virtual.
Los asambleístas de Unión por la Esperanza, bloque correísta, algunos legisladores del Partido Social Cristiano y otros de Pachakutik le dieron la espalda a Llori nuevamente.
Y la titular de la Asamblea decidió cerrar la sesión a las 23:11. “No contamos con el quórum requerido para instalar esta sesión. En este sentido, esta sesión sigue suspendida y en su momento se realizará la convocatoria respectiva”, expresó Llori.
El asambleísta de Pachakutik, Darwin Pereira, y de Unes, Ronny Aleaga, en horas previas adelantaron que no participarían de la sesión porque contradice la resolución aprobada para sesionar de forma presencial. (I)
