PORTOVIEJO, Manabí
El ataque armado perpetrado el jueves 17 de abril en la gallera La Fortaleza, ubicada en la zona limítrofe entre Manabí y Santo Domingo de los Tsáchilas, dejó una estela de dolor: doce personas fallecieron y varias resultaron heridas, entre ellas una joven madre de familia, quien quedó cuadripléjica, y su esposo, Vicente Palacios, de 37 años, que murió camino al hospital.
La tragedia marcó para siempre a esta familia, originaria del cantón El Carmen. Vicente había asistido al evento con su esposa Patricia, de 26 años, y dos de sus tres hijos, de apenas 8 y 6 años. Aunque los menores salieron físicamente ilesos, la afectación psicológica persiste y reciben atención especializada bajo custodia policial.
Patricia recibió un disparo en el cuello, lo que comprometió su médula espinal. La bala quedó alojada en la zona cervical, causándole una inmovilidad total del cuerpo. Inicialmente fue trasladada a una clínica privada debido a la saturación en el hospital público, y actualmente continúa bajo vigilancia médica en el Hospital Gustavo Domínguez de Santo Domingo.
Según familiares, ni Vicente ni su esposa eran parte del mundo de las apuestas. “Él solo asistía por gusto a los gallos, pero no era gallero”, dijo una de sus parientes. Su presencia en La Fortaleza fue una coincidencia trágica.
La familia, de limitados recursos económicos, ha iniciado una campaña de ayuda solidaria y organiza una rifa benéfica para este sábado 10 de mayo, con el objetivo de cubrir los elevados costos médicos, de rehabilitación y manutención de los hijos.
Por su parte, la Policía Nacional confirmó la captura de cuatro sospechosos del atentado, y ha mantenido vigilancia permanente sobre la familia afectada como medida de protección. (I)