QUITO, Pichincha
La Cancillería de Ecuador informó ayer que la migración irregular hacia los Estados Unidos ha disminuido considerablemente este año.
Según las estadísticas proporcionadas, entre enero y octubre de 2024, se registró una caída del 70% en el número de ecuatorianos que cruzaron la selva del Darién, en comparación con el mismo periodo de 2023. Este descenso se refleja en los datos del Servicio Nacional de Migración de Panamá, que indicó que 3.6 veces menos personas se aventuraron por esta peligrosa ruta.
Asimismo, la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos reportó una baja del 80% en los encuentros con migrantes ecuatorianos, registrando solo 15,921 casos en abril de 2024, un pico notablemente más bajo que el de años anteriores. En México, el flujo irregular de ecuatorianos también se redujo un 35% desde marzo, según el Instituto Nacional de Migración.
El Gobierno de Ecuador, a través de la Cancillería, ha tomado medidas para frenar esta migración irregular. Entre ellas, destacan los programas de migración circular con países como España, Alemania e Israel, con planes para incluir a Francia, Italia, Canadá y Estados Unidos, con el fin de generar más oportunidades laborales para los ecuatorianos.
Además, el gobierno ha fortalecido la oferta de programas sociales y servicios para mejorar la calidad de vida y promover los derechos humanos en el país.
La disminución en la migración irregular refleja los esfuerzos del gobierno por reducir los riesgos asociados con esta actividad. Sin embargo, ¿Serán suficientes estas medidas para frenar completamente la migración irregular o se necesita un enfoque más integral para resolver las causas profundas de este fenómeno? (I)
