Alrededor de 5.000 militares refuerzan y fortalecen las fronteras con retenes fijos y móviles más fuertes, fronteras fortalecidas, más y contundentes operaciones de control de armas, municiones y explosivos a nivel nacional y mayor rotación de personal en cárceles; esta es una nueva fase de seguridad que el país está viviendo, con la incorporación de cerca de 5.000 reservistas a las filas de las Fuerzas Armadas.
Estos jóvenes, con edades entre 20 y 30 años, que han sido reentrenados para enfrentar las amenazas actuales de manera efectiva, brindarán una respuesta rápida y organizada ante cualquier emergencia. Los reservistas con las mejores condiciones ya están en las calles apoyando las labores de defensa de la patria, trabajando codo a codo con el personal militar en la lucha contra el crimen organizado, el narcotráfico y otras amenazas a la paz y seguridad de los ecuatorianos.
“No permitiremos que nada ni nadie desestabilice la paz de los ecuatorianos, nuestros militares y el Bloque de Seguridad responderán con contundencia para garantizar el bienestar y la tranquilidad del país; hay mucho por trabajar y todo aquel que pretenda interrumpir nuestro proceso de lucha, simplemente no piensa en la gente”, mencionó el ministro de Defensa Nacional, Gian Carlo Loffredo. 5.000 botas en tierra, que forman parte de una estrategia integral que el sector defensa sigue fortaleciendo en medio de un conflicto armado no internacional, y que basa su accionar en proteger a los ciudadanos, garantizar la soberanía e integridad de un Ecuador que busca días mejores.
El Gobierno Nacional junto a su ministerio de Defensa Nacional, reafirma su compromiso con un país de paz.