
QUITO, Pichincha
El Ministerio de Trabajo reemplazó la polémica placa de disculpas dirigida a la vicepresidenta Verónica Abad, luego de que la primera versión fuera criticada por ser ilegible. La nueva placa cumple con los requisitos de legibilidad y visibilidad exigidos por la justicia, cerrando así una controversia política en torno a la reparación ordenada por sentencia judicial.
La primera placa, instalada en cumplimiento de una orden judicial, tenía un diseño con letras poco visibles, lo que generó cuestionamientos sobre su verdadero propósito. La jueza Nubia Vera, encargada de verificar el cumplimiento de la sentencia, advirtió que el Ministerio no respetó las especificaciones de tamaño y claridad establecidas en el fallo.
Por esta razón, el Ministerio instaló una nueva versión con letras negras sobre fondo claro, asegurando que el texto pudiera leerse sin dificultad.
Contexto de la sanción a Abad
La colocación de la placa se enmarca en el proceso de reparación ordenado tras la suspensión administrativa de Verónica Abad por parte del Ministerio de Trabajo. Sin embargo, la Corte Constitucional determinó que la sanción era inconstitucional, pues un vicepresidente no puede ser removido de su cargo mediante un proceso administrativo.
Este episodio ocurre en medio de la tensa relación entre Abad y el presidente Daniel Noboa, marcada por desacuerdos sobre su rol en el Gobierno.
El reemplazo de la placa resuelve un error técnico, pero también evidencia la pugna entre la Vicepresidenta y el oficialismo. ¿Fue la primera placa un descuido o una forma de minimizar la reparación ordenada? (I)