QUITO, Pichincha
La asambleísta reelecta por Los Ríos, Mónica Salazar, anunció el 23 de abril de 2025 su ruptura total con Revolución Ciudadana (RC). Durante la sesión de la Comisión de Participación Ciudadana, relató que más allá de su comunicado del 15 de abril declarándose independiente y sufrió “maltratos” y el rechazo de las principales figuras del correísmo.
Salazar detalló que, en 2024, gestionó un crédito de USD 950 000 con la Corporación Financiera Nacional (CFN) para adquirir una piladora y habilitar un centro de acopio destinado a los agricultores de su provincia. Al enfrentar retrasos en la maquinaria, recurrió a asesores legales de RC en busca de apoyo, pero le respondieron que “no había nada que hacer”.
El exsecretario jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, estimó públicamente la deuda cercana al millón de dólares, y advirtió que Salazar incurrió en mora con la CFN. El conflicto llegó hasta la Corte Constitucional, que inadmitió uno de los recursos presentados, poniendo en riesgo su escaño. “Viviana Veloz me dijo: ‘Lo siento, no hay nada que hacer; a mí me llega la orden y al otro día te vas’”, afirmó la legisladora.
Salazar acusó de indiferencia a la dirigencia nacional de RC, especialmente a su presidenta, Luisa González. Relató que, mientras defendía en Suiza al expresidente Jorge Glas, la directiva cantonal se renovó a sus espaldas sin que nadie la consultara. “Pequé de leal — confesó con voz entrecortada— y así me pagaron”.
Frente a este panorama, la asambleísta optó por comunicarse directamente con el líder del movimiento, el expresidente Rafael Correa. Le escribió para coordinar su labor legislativa sin intermediarios, pero Correa le respondió que no volvería a dialogar con ella. “Él terminó de cortar el cordón umbilical que me unía a Revolución Ciudadana”, concluyó Salazar. (I)