
LAS VEGAS, Nevada
Michael Morales deslumbró en la pelea estelar de UFC 322 y derrotó con autoridad a Sean Brady, segundo en el ranking wélter. El ecuatoriano impuso su potencia desde el primer asalto y firmó una victoria que lo acerca de forma directa a la disputa del título mundial.
Morales, nacido en Pasaje, El Oro, analizó con calma los primeros segundos y leyó cada movimiento del estadounidense. Brady intentó presionarlo con golpes frontales, pero falló en repetidas ocasiones. Tras cumplirse el primer minuto, el ecuatoriano aceleró el ritmo, soltó una combinación precisa y abrió el camino hacia el dominio total del combate.
El tricolor castigó con puños certeros y derribó a Brady con una secuencia contundente. Una vez en la lona, cerró la pelea con un nocaut técnico, que obligó al árbitro a detener la acción. Con esta actuación impecable, Morales elevó su récord profesional a 19 victorias consecutivas, con 14 nocauts, una marca inédita para un peleador ecuatoriano en UFC.
El triunfo lo proyecta al top 3 del peso wélter, donde el campeón Jack Della Maddalena mantiene la corona. La contundencia del ecuatoriano y su crecimiento sostenido aumentan la expectativa de que pueda convertirse en el primer campeón mundial de UFC nacido en Ecuador, un objetivo que ya suena más cercano y real.
Incluso figuras como Marlon “Chito” Vera han respaldado su ascenso, convencidos de que Morales está listo para pelear por el cinturón. Su desempeño en Las Vegas confirmó su madurez, su evolución técnica y su capacidad para brillar en escenarios de máxima exigencia. (D)
