QUITO, Pichincha
El Comité de Operaciones de Emergencia de Quito, presidido por el alcalde Santiago Guarderas, analizó la situación epidemiológica de la ciudad, y la capacidad actual de la Red Pública de Salud para la atención de pacientes covid-19.
Con base a las resoluciones del Comité de Operaciones de Emergencias Nacional emitidas la tarde de ayer, en el contexto de las festividades por Navidad y Año Nuevo frente a la variante Ómicron, el COE de Quito dispuso pasar del nivel de alerta epidemiológica amarillo a naranja en la capital. Y se tomaron las siguientes medidas de restricción y bioseguridad:
Se estableció que dentro de los balnearios municipales exista un aforo máximo del 50 % y un horario para uso de sus instalaciones, desde las 06:00 hasta las 18:00.
Respecto a los aforos en el transporte público, se resolvió su reducción al 75 %. Esta medida será revisada durante la primera semana de enero, de acuerdo con los indicadores epidemiológicos y su evolución.
Por otra parte, se hizo un llamado a la ciudadanía a que complete su esquema de vacunación para primera, segunda y dosis de refuerzo, y que acuda a los puntos de vacunación establecidos en coordinación con el Ministerio de Salud Pública.
En ese punto, se solicitó la actualización de la Ordenanza 010 en los siguientes puntos: control de temperatura, mascarilla en el auto, desinfección de calzado y otros que se consideren necesarios.
También está vetado el consumo y expendio de bebidas alcohólicas y de moderación en espacios públicos.
Además, se acogió la recomendación del COE Nacional para “exhortar a la ciudadanía en general …, mantenga los protocolos de bioseguridad, el distanciamiento social, uso correcto de mascarilla, lavado frecuente de manos, no permanecer en sitios sin ventilación y acudir oportunamente a los centros de vacunación, de conformidad al plan dispuesto por el Ministerio de Salud Pública”. (I)