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El primer ministro británico, Boris Johnson, se enfrenta a un interrogatorio de los opositores en el Parlamento este miércoles, y a una amenaza más preocupante de los legisladores de su propio partido, docenas de los cuales están conspirando para derrocarlo por las burlas al confinamiento.
Los legisladores conservadores están evaluando si desencadenar un voto de censura en Johnson en medio de la ira pública por el escándalo del “partido”, pubica AP News. Es un sorprendente cambio de suerte para un político que hace poco más de dos años llevó a los conservadores a su mayor victoria electoral en casi 40 años.
Johnson y los ministros leales estaban usando una combinación de presión y promesas en un esfuerzo por evitar el voto de censura.
Según las reglas del Partido Conservador, se puede activar un voto de censura en el líder del partido si 54 legisladores del partido escriben cartas a un funcionario del partido solicitando esta opción.
Si Johnson perdiera un voto de confianza entre los 360 legisladores del partido, se desencadenaría un proceso para reemplazarlo como líder conservador. El ganador se convertiría en primer ministro.
La sesión semanal de preguntas del primer ministro en la Cámara de los Comunes este miércoles se produce una semana después de que Johnson se disculpó con los legisladores por asistir a una fiesta en el jardín de sus oficinas de Downing Street en mayo de 2020.
En ese momento, los ciudadanos de Reino Unido tenían prohibido reunirse con más de una persona fuera de su hogar para ayudar a frenar la propagación del coronavirus. (I)
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