QUITO, Pichincha
El Ministerio del Trabajo afina los detalles de un proyecto de reforma al artículo 216 del Código del Trabajo, que busca transformar el esquema de la jubilación patronal en Ecuador. La propuesta será presentada este martes 29 de abril de 2025 ante el Consejo Nacional de Empleo y Salarios, y luego remitida a la Asamblea Nacional para su trámite legislativo.
La ministra de Trabajo, Ivonne Núñez, explicó que la iniciativa responde a un problema estructural que ha generado despidos masivos en el sector privado. “Muchas personas pierden su empleo entre los 19 y 24 años de servicio para evitar que accedan a la jubilación patronal. Además, superar los 40 años dificulta considerablemente la reinserción laboral”, advirtió Núñez durante una entrevista el pasado 25 de abril.
Según un estudio reciente del Ministerio del Trabajo, apenas el 4% de los trabajadores del sector privado que superan los 25 años de servicio acceden actualmente a la jubilación patronal, lo que demuestra su escasa aplicación y efectividad como mecanismo de protección social.
En la normativa vigente, este beneficio se activa únicamente si el trabajador ha laborado de forma continua durante 25 años para una misma empresa, y es financiado exclusivamente por el empleador. La fórmula para calcular la pensión considera un monto equivalente al 5% del promedio anual del salario de los últimos cinco años, multiplicado por los años de servicio, además del fondo de reserva acumulado.
¿Qué plantea la nueva propuesta?
La reforma impulsada por el Gobierno establece la creación de un fondo común de jubilación patronal, alimentado por aportes tanto del trabajador como del empleador desde el inicio de la relación laboral, sin importar el tipo de contrato.
Núñez detalló que este fondo sería administrado por un fideicomiso público, a cargo del IESS o del Banco del Pacífico, garantizando su trazabilidad y estabilidad. El objetivo es eliminar la restricción de permanencia en una sola empresa, permitiendo que los aportes acumulados durante distintas relaciones laborales sean reconocidos en su totalidad.
El aporte del trabajador se calcularía como un porcentaje fijo del sueldo contractual, diferenciándose del aporte al IESS, que se descuenta sobre la remuneración total, incluyendo horas extra y otros ingresos adicionales.
El monto final que recibirá cada trabajador al jubilarse todavía no está definido. La ministra indicó que se requerirá de un estudio actuarial técnico por parte del IESS, para establecer la fórmula de cálculo más adecuada y sostenible.
Este nuevo esquema también intenta reducir el impacto financiero que representa para los empleadores pagar una pensión completa tras décadas de relación laboral continua, una carga que ha desincentivado la contratación de personal de mayor edad o con larga trayectoria.
Antecedentes de propuestas similares
Cabe recordar que, en 2021, el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) también presentó un proyecto de reforma sobre la jubilación patronal. Esa iniciativa proponía un fondo exclusivo financiado solo por los empleadores, sin incluir aportes del trabajador, y no prosperó en la Asamblea Nacional.
El actual Gobierno busca una alternativa más equitativa y sostenible, en la que tanto empleados como empresas asuman responsabilidades compartidas en la construcción de una vejez digna. (I)