AZUAY, Cuenca
El 1 de junio de 2025, los embalses Mazar y Paute presentan reservas en niveles máximos, gracias a las lluvias recientes en las cuencas altas del Austro, que mantienen el flujo normal de los ríos Yanuncay, Tarqui, Tomebamba y Machángara, principales afluentes del río Paute.
La represa Mazar, con una capacidad de almacenamiento de 410 millones de metros cúbicos, registra una cota de 2.153,85 metros sobre el nivel del mar, cercana a su límite superior operativo, que es de 2.100 metros. Por su parte, el embalse Daniel Palacios, que alimenta la hidroeléctrica Paute-Molino, se encuentra en 1.991 metros, también próximo a su máxima capacidad.
Según Celec Sur, el caudal promedio del río Paute supera los 135 metros cúbicos por segundo, asegurando la estabilidad en la generación hidroeléctrica. Este domingo, la central Paute opera con ocho de sus diez turbinas, mientras que la central Mazar permanece fuera de servicio.
El Operador Nacional de Electricidad (Cenace) prevé cubrir el 90% de la demanda eléctrica dominical con energía hidroeléctrica, el 8% con plantas térmicas y de gas natural, y el restante con fuentes no convencionales. Coca Codo Sinclair aportará el 35% de la electricidad, mientras que el Complejo Mazar-Paute-Sopladora contribuirá con un 26%.
El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) anticipa el inicio del período seco para los últimos cuatro meses de 2025, lo que genera expectativas en torno a la gestión energética, aunque el presidente Daniel Noboa aseguró que este año no se repetirán los cortes de energía sufridos en 2024.
La estabilidad en los niveles de agua y la adecuada gestión de las centrales hidroeléctricas resultan clave para garantizar el suministro eléctrico durante el año, especialmente en la región del Austro, donde la demanda sigue en aumento. (I)