QUITO, Pichincha
La Superintendencia de Bancos ha identificado varias empresas e instituciones que utilizan correos electrónicos, páginas web, hojas volantes y redes sociales para ofrecer productos crediticios o de inversión y que no tienen permisos para funcionar en el país.
Estas entidades intentan captar a empresarios, comerciantes, jubilados, agricultores, transportistas y empleados, les conquistan con bajas tasas de interés y sin requerimiento de garantías ni requisitos mínimos.
La institución, encargada de fiscalizar a los bancos, aclara que esas entidades no están autorizadas a operar y que podrían poner en riesgo las finanzas de los ciudadanos.
En la página de la Superintendencia consta un listado con los nombres de las instituciones que han identificado, que operan bajo esa modalidad. Hay instituciones desde el 2017 y otros años; en el 2021, fueron identificadas empresas como Pipmaster y Big Money. (I)
