QUITO, Pichincha
El pueblo Kayambi, en el norte de Pichincha, será el escenario del lanzamiento de Urku, el primer token ambiental sostenible de Ecuador. Este activo digital nace con el objetivo de enfrentar la desnutrición crónica infantil en zonas rurales y restaurar los ecosistemas andinos, con una proyección económica estimada en 200 millones de dólares.
Urku representa unidades digitales que certifican avances ambientales, como la recuperación de una hectárea de bosque o la captura de una tonelada de carbono. Pero va más allá, pues también monetiza resultados sociales tangibles, como la reducción de la desnutrición infantil, que afecta a miles de niños en comunidades rurales del país.
Cada token será rastreable en términos técnicos, contables y sociales, lo que genera confianza entre inversionistas de impacto, instituciones ambientales y organismos de desarrollo social. Esta transparencia convierte a Urku en una herramienta escalable para transformar territorios ancestrales.
Primer gemelo digital en la región andina
El proyecto incorpora la creación del primer gemelo digital en la región andina, una réplica virtual del pueblo Kayambi que permitirá monitorear en tiempo real el impacto ambiental, social y económico de los tokens. Esta innovación tecnológica surge gracias a la alianza entre el pueblo Kayambi, la Red Santa Cruz de Chile, una empresa ecuatoriana y la multinacional japonesa NTT Data.
El valor inicial de Urku será de 7,77 dólares, con una estimación de crecimiento hasta los 17,50 dólares en 2030. Se planea emitir más de 30 millones de tokens, reflejando el alcance del impacto esperado en los ecosistemas altoandinos. El dirigente Kayambi, Henry Campues, calificó este proyecto como un “paso firme hacia un territorio más justo, saludable y próspero”, con planes que incluyen mejorar el acceso al agua, sistemas de riego resilientes y diversificación productiva en áreas vulnerables.
Urku cuenta con el respaldo académico de la Universidad San Francisco de Quito y la Fundación Conin, reconocida por su trabajo contra la desnutrición infantil en América Latina. Además, la certificación ambiental del BioCarbon Registry garantiza su valor en los mercados internacionales de bonos verdes.
La comercialización del token comenzará en el segundo semestre de 2025 a través de un fondo de inversión de impacto administrado por la Red Santa Cruz en Chile, asegurando que cada inversión tenga un seguimiento directo en los resultados sociales y ecológicos en Kayambi. (I)