DUBLÍN, Irlanda
Segundo Ordóñez, campesino abacalero, que fue sometido a formas contemporáneas de esclavitud por la empresa Furukawa Plantaciones C.A. del Ecuador, recibió el Premio 2023 para Personas Defensoras de Derechos Humanos en Riesgo, en el EPIC Immigration Museum de Dublín, Irlanda.
La empresa de capitales japoneses cumplió 60 años en febrero de este año, tiempo en el cual sometió a decenas de campesinos y campesinas, en su mayoría afroecuatorianas, a vivir y trabajar en condiciones indignas, dentro de campamentos hacinados, sin agua ni energía eléctrica, con salarios ínfimos y sin contratos ni seguridad social.
Este caso de graves y sistemáticas vulneraciones de derechos humanos se conoció en marzo de 2018 cuando un grupo de ex trabajadores y trabajadoras de la empresa rompieron el silencio y denunciaron ante la Presidencia de la República que eran víctimas de precarización y explotación laboral por parte de su empleador, Furukawa Plantaciones C.A. del Ecuador.
Inacción estatal
Ante la inacción estatal, en octubre de 2018 llevaron su denuncia ante la Defensoría del Pueblo de Ecuador, entidad que el 18 de febrero de 2019 hizo público el Informe de Verificación de Derechos Humanos señalando que se trataba de un caso de Servidumbre de la Gleba (una forma contemporánea de esclavitud).
En el informe se develaron múltiples violaciones de derechos humanos entre ellos: intermediación laboral (tercerización) prohibida en la Constitución de la República del Ecuador; trabajo infantil; jornadas laborales de más de 10 horas; falta de acceso a la educación y a la salud; analfabetismo, e incluso niños y adultos sin registro de nacimiento.
Como consecuencia del trabajo forzado y sin equipos de trabajo adecuados, algunos de los ex trabajadores han sufrido mutilaciones limitando su capacidad para trabajar o enfrentan enfermedades catastróficas.
Defensores de los derechos humanos
El Premio Anual de Front Line Defenders para Personas Defensoras de Derechos Humanos en Riesgo se creó en 2005 para rendir homenaje a la labor de quienes contribuyen de forma destacada y valiente a la defensa y protección de los derechos humanos de otras personas, a menudo, asumiendo un gran riesgo personal. Segundo Ordóñez en su intervención refirió:
“Como Afroecuatorianos nosotros levantamos la mano hacia los países, que nos observen, que nos tomen en cuenta como seres humanos para que esta oportunidad de poder declarar que esas compañías japonesas que están metidas en el Ecuador ya no hagan más tanta crueldad hacia nosotros, hacia el campesino”, destacó Ordóñez.
Y dijo que son compañías que han venido explotando durante 60 años, “esclavizándonos en el trabajo y nosotros hemos caído en las manos de ella sin darnos cuenta, por no tener un nivel de estudio. Por eso ellos siempre han estado encerrándonos, explotándonos porque no sabemos hacer otra cosa que trabajar en el campo, somos campesinos. Y como campesinos siempre ha sido la lucha así para salir hacia adelante con toda nuestra comunidad”.
Reconocimiento internacional
El reconocimiento centra la atención internacional en el trabajo y la lucha de las personas defensoras de derechos humanos, ofreciendo una importante plataforma nacional e internacional donde visibilizar y abogar por los asuntos de derechos humanos que defienden.
Las personas ganadoras fueron seleccionadas entre decenas de candidaturas presentadas en un proceso de nominación público y seguro, que se lleva a cabo en diciembre y enero de cada año.
Este premio constituye un reconocimiento importante no solo al liderazgo de Segundo Ordóñez en este camino de justicia y reparación, sino también al proceso colectivo de cientos de trabajadoras y trabajadores abacaleros que, pese a la perversidad de la empresa y la indolencia del Estado, continúan organizados en defensa de sus derechos humanos. (I)
