Por Pedro Merchán Miñán, abogado Mgs.
El deporte como política deportiva ha sido un tema de debate en Ecuador, especialmente con las gestiones de Andrea Sotomayor, Sebastián Palacios y Andrés Guschmer. Quienes han tenido roles diferenciados en la política deportiva del país, pero sus gestiones han generado críticas y decepciones, a más de perjuicios al deporte.
Andrea Sotomayor, quien al frente de la Secretaría del Deporte, apoyó abiertamente a Lenin Moreno en la campaña por el “Siete veces Sí”, con expresa prohibición en la Ley del Deporte, impulsó varias intervenciones y hoy sus asesores y subsecretarios están frente a los principales organismos deportivos del país. Se atribuye a ella una marcada intervención y favoritismo al futbol profesional.
En su gestión se autodefinió al Deporte como política de Estado. Se propuso sancionar a Richard Carapaz, por no haberla saludado en los juegos bolivarianos y más tarde aducía que era por temas de alcohol.
En su gestión se impulsaron las famosas “canchas azules” y se evidenció corrupción en la empresa pública CEAR EP de la que ella formaba parte de la Dirección.
Generó a través de Lenin Moreno un Reglamento Sustitutivo de la Ley del Deporte, con que se ratificó a sus más cercanos colaboradores en los organismos deportivos previamente intervenidos.
Sebastián Palacios, quien fue ministro del Deporte en el gobierno de Guillermo Lasso, impulsó un proyecto de nueva Ley del Deporte. Sin embargo, expresó su decepción porque no se trató el proyecto de una forma correcta en la Comisión de Salud.
Palacios, licenciado en Relaciones Internacionales y Finanzas por la Universidad San Francisco de Quito, ha estado vinculado al partido Sociedad Unida Más Acción (SUMA). Su gestión al igual la de Lasso, marcada con corrupción en los proyectos de deducibilidad tributaria, donde se llegó a cobrar hasta el 20% para aprobarlos.
Por otro lado, Andrés Guschmer, actual ministro del Deporte en el gobierno de Daniel Noboa, es un periodista deportivo, presentador de televisión, empresario y farandulero ecuatoriano.
Durante su carrera en medios, ha mantenido una importante presencia empresarial en el sector de la organización de eventos y espectáculos, sin experiencia en Dirigencia Deportiva y con un direccionamiento a Barcelona.
Su gestión marcada por la falta de recursos a los deportistas de alto nivel y organismo deportivos.
Mantiene contradicciones en los registros de Directorios de algunos organismos deportivos, pues con expresa prohibición de la reelección en la dirigencia, existen varios organismos en donde se produce la violación al Art. 151 de la Ley del Deporte, caso como AFA y ASOGUAYAS son algunos de estos temas.
Es importante que el deporte y la política que son polos muy diferentes que no deben ser mesclados, su fusión implica decisiones y acciones que perjudican a los deportistas. Este impacto se exhibe cada cambio de gobierno donde se posesionan gente que no conoce el deporte. (O)
